Crónicas irreverentes sobre el país de la «dolarocracia» (reseña)

Hacer periodismo desde lo literario es establecer una búsqueda, intentar satisfacer una inquietud a partir de un ejercicio en el que debemos tomar consciencia de nuestro tiempo para reflejar, si se puede, la realidad paradójica en la que vivimos. En este sentido, es de vital importancia crear un tono preciso a través del lenguaje. Se debe provocar un diálogo que induzca al lector a que reflexione, y el mejor modo para ello es contando una historia, algo que Andy Robinson realiza y con gran maestría en esa serie de crónicas un poco granujas y aventureras que reúne en Off the Road. Miedo, asco y esperanza en América (Ariel).

El periodista británico, que inició su carrera en la década de los ochenta aquí en España, es un gran conocedor de la actualidad socio-política de nuestro país y también de la poderosa tierra de las oportunidades, ese territorio que no se cansa de vender la moto «del sueño americano». Salvadores de la vieja Europa en la primera mitad del siglo XX, los Estados Unidos se erigieron como el modelo a seguir para la civilización moderna, basada en un sistema capitalista que ofrecía la posibilidad de vivir en el ya célebre «Estado del Bienestar». No obstante, todo lo que sube, baja; pese a que el país norteamericano no termine de aceptarlo, o peor aún, no se percate de que su estilo de vida (ese American way of life) solo ha provocado importantes desigualdades en su engranaje. Robinson, sin pelos en la lengua, relata esa pasión por la «dolarocracia», centrándose en las incongruencias e hipocresía que esconde tras de sí ese modus vivendi.

Desde Las Vegas a Detroit, pasando por San Francisco, Nueva York, Albuquerque, Phoenix, Vermont o Carolina del Norte, la pluma de Andy Robinson se muestra incisiva como la de otro genio del periodismo más irreverente, el mítico Hunther S. Thompson. Debe ser así para subrayar esa otra realidad (quizá la más realista) en la que vive la mayoría de los estadounidenses, es decir, una vida de despropósitos en la que personajes como el magnate Sheldon Adelson o Donald Trump triunfan, una vida de campos de golf en zonas desérticas, espectáculos grotescos y violencia racista, una vida precaria en la que el índice de asesinatos, drogadicción e indigencia son escalofriantes. 

Los Estados Unidos ejemplifican a la perfección esa dicotomía, esa extrema desigualdad en la que un uno por ciento de la población posee más riqueza que el 99 por ciento restante. Con humor, pero con una profunda sensatez, estas crónicas de Andy Robinson permiten ver más allá de esa elegante y pulcra fachada. Una lectura que nos abre los ojos ante la falsa santurronería yankee.