Fronteras, umbrales y otros rincones por descubrir (artículo de prensa)

De Joël Mestre se han dicho muchas cosas. Autor de arte-ficción, pintor imprescindible, fanstasma del deseo, autor inteligente e irónico, simulador de “altos vuelos”, metafísico... No cabe duda, y a los hechos me remito, que el pintor castellonense es una clara referencia del arte surgido a finales del pasado siglo XX y principios del XXI en España. Numerosos han sido los críticos que se han rendido ante esta realidad extraña, virtual, que plasma en sus obras. Quizá, parte de culpa de que esto sea así, esté en los títulos de sus cuadros, que se han convertido en pieza fundamental y forman una parte esencial de la obra en sí. Así, Mestre consigue trasladarnos con delicada ironía, sus preocupaciones sobre el mundo actual. El mismo dice que “creo que la ironía puede ser constructiva, le quita hierro a la vida y ayuda de algún modo a desmitificar los acontecimientos que no siempre son fáciles de digerir. Hay cuadros que nacen bautizados y es sorprendente lo que tiran las palabras durante el proceso en el que va madurando el cuadro. Cambiar un adjetivo, una preposición pueden acabar modificando la escena”.

'Curva de dos tiempos'

Ahora, como buen hijo pródigo, el arte de Joël Mestre ha vuelto a Castellón, su ciudad, con una nueva exposición titulada ‘Lugares vagos’ en la galería Cànem. Desde que comenzara su andadura en el mundo del arte, este autor vinculado a la nueva figuración española y en concreto a la emergente durante la década de los noventa, ha estado ligado a Cànem. No era de extrañar, pues, que en su vuelta, volviera a sus raíces expositivas.

‘lugares vagos’

En la exposición ‘Lugares vagos’, su pintura sigue explorando los géneros pictóricos convencionales y la tradición escénica. La muestra trata lugares fronterizos, umbrales o espacios inestables, donde conviven medios de distinta naturaleza. Si bien los contextos de su pintura y su apariencia narrativa, tienen que ver con la naturaleza, la ciudad y sus costumbres, también está presente en su planteamiento, una influencia de carácter artificial y tecnológico. Como ya se ha señalado, su pintura está tocada por la “virtualidad” como estrategia de seducción, un concepto en el que se entrecruzan todo tipo de medios indirectos como: literatura, música, prensa, televisión, software e incluso la propia red. Su propuesta figurativa nos sitúa con un pie en la evidencia y el otro en un territorio de ficción. Tal y como dijo Chistian Parra-Duhalde, Mestre nos ofrece “el mundo de lo íntimo e irrevelable; la escena, la historia que solo podemos imaginar. Carambola fi­nal entre el artificio y lo verdadero como brillante acto de Arte-Ficción”.

Los espacios que Joël Mestre nos ha presentado a lo largo de su trayectoria deben mucho a la pintura metafísica italiana, especialmente a Giorgio de Chirico y Alberto Savinio y al surrealismo. Su arte se deja influir por cierto geometricismo dePablo Palazuelo . Como bien han dicho, Mestre es el pintor español que en la actualidad más se ha centrado en analizar visualmente el papel que los medios de comunicación de masas juegan en la conformación de la cultura postmoderna.

Desde el 2002, su última individual en Cànem, ha expuesto en Madrid, Sevilla, Chicago, Valencia y Praga, además de participar en numerosas colectivas con recorrido internacional como: ‘Pieza a Pieza’ (2003), organizada por el Instituto Cervantes o proyectos singulares como ‘Encapsulados’ (2007-08) en Cartagena y Tokio. En definitiva, Joël Mestre es un artista único que ya forma parte de la historia.

'Signos de la Nacional'