La visión cambiante

Los textos de Zygmunt Bauman sobre la "modernidad líquida" han cambiado nuestra visión del mundo contemporáneo y nos permiten afrontar nuestro miedo más inconfesable: ¿qué futuro nos espera?
¿Vosotros lo sabéis? Pues yo aún menos. En el medio en el que trabajo --es decir, en prensa escrita-- todo parece abocado al terror. Y digo esto porque el mundo digital trae consigo muchos de esos cambios en la forma de pensar y actuar que Bauman ya nos advertía. Los periódicos en papel parecen estar encaminados al olvido, a portar la etiqueta de obsoletos, a ser un simple recuerdo gracioso de una época pasada. El momento actual en el que estamos inmersos, con esa acuciante situación de malestar debido a la coyuntura económica en la que nos han enfangado, provoca, además, recortes y recortes en muchos rotativos. Quizá por todo esto, y más, nos encaminemos a estos otros soportes que la era tecnológica nos ha proporcionado, como son los blogs. Este es un modo para defender aquello por lo que algunos de nosotros comenzamos a dedicarnos a esto del periodismo, a saber: reflexionar sobre el mundo que nos rodea; crear un espacio abierto para la crítica y el debate; y para acercar aquellas propuestas que nos sirvan de estímulo para aumentar el conocimiento y el saber. 
Volviendo al sabio polaco Zygmunt Bauman, me niego rotundamente a formar parte de ese "selecto club" que destaca en una de sus últimas obras, Comunidad. El de Poznan remarca que estamos inmersos en una época en la que nos servimos de la débil excusa --y que muchos de nosotros nos creemos tontamente-- del "haga lo que haga no servirá de nada". Eso, amigos míos, supone la perdición e incluso la muerte para el intelecto del ser humano. No podemos, es más me atrevería a decir que no debemos, caer en la tentación de la dejadez. Por más golpes que nos den, hemos de ser capaces de recuperarnos y seguir creyendo en el poder de la palabra. En mi caso, al dedicarme a temas más cercanos a las artes y la cultura, debo luchar un poco más, ya que por desgracia casi siempre somos "los últimos de la lista", los tontos a los que poder ningunear y dejar de lado "por amor al arte" (como odio esta expresión). Por esa razón, adelanto que seguiré provocando quebraderos de cabeza, y algún que otro bostezo de aburrimiento, a más de uno. No me rendiré tan fácilmente y continuaré esta labor en pro del conocimiento y la capacidad crítica para mi bien propio y para el resto de pequeños saltamontes que se dejen atrapar en mis redes. The show must go on!

Zygmunt Bauman

Comentarios

Entradas populares