El retrato de un héroe moderno contradictorio (reseña literaria)

Bajo el pseudónimo de Blaise Cendrars --Tras las brasas, las cenizas-- se esconde el escritor suizo Frédéric Sauser Halle, uno de aquellos autores atípicos que escribió de todo. Viajero, cosmopolita, aventurero... se atrevió con prácticamente todos los géneros habidos y por haber. Su increíble producción literaria, escrita además con una velocidad de vértigo, nos permiten intuir el cáracter extrovertido, hasta cierto punto derrochador, del poeta, novelista, ensayista, autor de guiones y crítico cinematográfico. Sin duda, Cendrars fue una de aquellas personas que poseen un magnetismo férreo gracias a sus peculiaridades. No es de extrañar, pues, que la mayoría de sus obras tuvieran un alto contenido autobiográfico. A lo largo del casi centenar de títulos, vamos descubriendo sus defectos y virtudes, sus logros y fracasos, su poderosa imaginación y su estilo ecléctico.
Miembro de un selecto, a la par que infortunado, grupo de escritores mancos como Cervantes o Valle-Inclán, Cendrars impregnó su literatura de pasajes exóticos. Un ejemplo de ello es la novela Ron, que publicó en 2008 Ediciones Barataria, una editorial barcelona con “vocación artesanal”.
Ganadora de premio nacional a la mejor labor editorial en 2008 junto a Libros del Asteroide, Global Rhythm, Impedimenta, Nórdica, Periférica y Sexto Piso, la independencia les ha permitido “seleccionar y preparar los libros sin urgencias”. Algo que el lector agradece ya que presenta nuevos formatos y nuevas concepciones como podemos disfrutar en Ron.
Con un estilo muy fluido y un lenguaje que recuerda mucho al estilo periodístico, Cendrars nos cuenta en esta novela la vida de un hombre extraordinario: el escritor y aventurero Jean Galmot. Este personaje, al que vemos retratado de una forma un tanto idealista, se nos aparece en un momento como una especia de Quijote paradójico que lucha contra los poderes coloniales. Galmot, diputado por Guayana --perteneciente a Francia, recordemos-- fue acusado de especulación en el ‘affaire’ del ron de 1919. Prisionero y arruinado, Galmot proclamó su amor inquebrantable por el pueblo de Guayana y juró defender su libertad hasta la muerte. Lo atractivo de la historia radica en las extrañas circunstancias de su muerte y las especulaciones y rumores acerca de un posible asesinato. Un retrato vivo y generoso de un contradictorio héroe moderno.

Comentarios

Esther ha dicho que…
Eres un tío super culto, muy sensible y escribes tremendamente bien. Admiro esas cualidades, quizá porque no las poseo. Siempre he deseado ser culta y no lo soy en absoluto, siempre he deseado saber expresarme bien y escribir mejor y soy una auténtica patata. je je je

Besos.
Eric GC ha dicho que…
No eres patata, te lo aseguro. Y cada uno tiene sus cualidades. En tu caso posees una mirada especial. Eso se refleja perfectamente en tus fotografías. Tienes una sensibilidad admirable para captar con tu cámara momentos de nuestra realidad que pueden resultar sencillos y los transformas para crear un mundo mágico. Como digo, de patata, nada de nada.

Más besos

Entradas populares