"Álbum del mes: GROOVY" SEPTIEMBRE'10

En varios de mis viajes a Barcelona, este disco siempre aparecía ante mis ojos, me llamaba silenciosamente para ser escuchado, para ser disfrutado de forma paciente. Finalmente, ante tanta insistencia, en mi último periplo por la ciudad condal, no pude negarle su deseo. La increíble portada, el título tan llamativo y, cómo no, los inigualables músicos, eran demasiado tentadores como para no hacerme con él. 

Groovy es el tercer álbum como líder de Red Garland, uno de los pianistas de jazz swing más importantes de la historia. Famoso por su técnica "block chord" (esto es, que utilizaba todos o casi todos los dedos de ambas manos de forma prodigiosa), Garland se hizo un hueco en el Olimpo del jazz al formar parte del quinteto de Miles Davis a mediados de los años 50 del siglo XX. Como dicen algunos, "las notas de Garland parecían tener unos rebotes rítmicos que hacía que las melodías de swing casi destellearan". No cabe duda de su maestría. En este elepé queda patente. Además, si tu trío lo completa el genio silencioso del contrabajo, Paul Chambers, y la eléctrica batería de Art Taylor, el éxito está más que asegurado. Estos tres músicos grabaron uno de los discos más completos (en formación de trío) que he oído. Las versiones de piezas como Willow Weep For Me o What Can I Say, Dear?, son majestuosas (sobre todo, la primera). El sonido es fácil de escuchar, armonioso, con gran ritmo y lleno de matices que uno debe saber apreciar. Y es que así son los trabajos de Garland, todo un refinamiento de la melodía y una interacción perfecta del jazz y el swing. Este trabajo está considerado por muchos como uno de los mejores modelos de grabación para trío de piano en el jazz moderno. Grabado en Hackensack, New Jersey, en 1957, creo que se avanzó a su tiempo. Por tanto, no es de extrañar que, finalmente, me regalara algunos momentos de gran placer. Es lo que tiene el buen jazz. La vida, amigos míos, es mucho mejor gracias al trabajo de hombre como Garland, Chambers y Taylor. ¿No creen?

De regalo os dejo con una de las obra que aparecen en el álbum, composición del propio Garland, Hey Now.