'Les ocasions retrobades' (entrevista a Pascual Arnal)

En la provincia de Castellón existen unas cuantas miradas especiales. Miradas de unos privilegiados que ven cosas que otros no podemos ver. Son las miradas de personas inquietas y curiosas que ahondan en los aspectos que nos hacen ser más humanos. Una de estas antentas miradas es la del fotógrafo vila-realense Pascual Arnal. Charlamos con él y esto es lo que pudimos descubrir de su trabajo.

Pregunta: En tu proyecto fotográfico ‘Les ocasions retrobades’ observamos imágenes de una realidad que muchas veces se nos escapa. Captas con la cámara rincones, momentos, gestos singulares... ¿Cuál es exactamente tu pretensión?

Pascual Arnal: Es un proyecto basado en analizar las diversas formas de representación como elementos vehiculares del conocimiento, entendiendo conocimiento como aprendizaje activo y no como almacenamiento de datos. Para ello se ha realizado un intenso trabajo de análisis y reflexión sobre qué cosas y cómo se han mostrado para que éstas mismas pudieran trascender en la percepción del espectador.

Mi obra se caracteriza por tener un discurso formal muy explícito el cual guarda estrecha conexión con procedimientos formales y de comportamiento arquetípicos anteriormente vistos pero realizados desde el presente. Esto crea en el espectador la sensación de que en las imágenes pasan muchas más cosas de las que en realidad se están viendo.

P: El campo de la fotografía artística, como el resto de las artes contemporáneas, está ahora en entredicho. Son muchos los debates en torno a qué es una obra de arte y qué no. ¿Cómo ves esta situación? ¿Crees que realmente existe una crisis en el arte donde ya no tiene cabida, debido al aburrimiento o al no entendimiento por parte del espectador, el concepto?

P. A.: Tengo bastante claro que una cosa es el arte y otra el mercado del arte y no creo que esté realmente en crisis, es posible que como en casi todas las cosas, tenga una parte frívola y chirriante, de hecho acabo de leer en un periódico que una casa de subastas espera vender un Basquiat por 5 millones de euros. A mí, como a mucha gente, no me es fácil entender porqué un cuadro de Jean Michel Basquiat puede llegar a costar 5 millones de euros. Lo que sí sé es que en algún sitio del planeta hay alguien dispuesto a comprarlo. Son las reglas de un mercado que en demasiadas ocasiones acaba confundiendo a la opinión pública mostrando solo los excesos y las necedades.

P: ¿Cómo definirías tu obra y en qué posición crees que se encuentra?

P. A.: Hice mi primera exposición de fotografía en 1993, hace ahora diecisiete años y es en 2010 cuando creo estar preparado para los embites de un mercado con normas y protocolos muy concretos. He pasado los últimos años tratando de delimitar unos parámetros teóricos-estéticos en los que la obra pudiera crecer libremente sin salirse del contexto especificado, por supuesto en esa construcción del discurso ha ayudado mucho el trabajo de campo que supone captar y descartar imágenes. Ahora presento la exposición Les ocasions retrobades que se hace acompañar de un libro de artista del mismo título y con textos del crítico de arte Álvaro de los Ángeles y del filósofo-metafísico Nicolás Sánchez durá.

P: ¿Eres de esos fotógrafos que van siempre con la cámara detrás por si surge alguno de esos momentos geniales? ¿O te haces una idea aproximada de qué buscas para luego retratarlo con más calma?

P. A.: En mi trabajo hay imágenes construidas desde ambas posturas, muchas son fortuitas, otras orquestadas por mí y otras tantas han requerido un tiempo de espera hasta que se ha dado la situación.

P: ¿Puedes explicar esto último?

P. A.: Si claro. Analizando qué imágenes se han venido utilizando para representar las guerras, decubrí que en la mayoria de ellas el denominador común era la presencia de incendios y humo, como comprenderás para realizar la pieza Les guerres tornen del més enllà tuve que esperar a que algún fenómeno parecido ocurriese.

P: ¿Te caracterizas por la diversidad temática y pluralidad de géneros? Si esto es así, ¿no tienes miedo de no tener una “firma de autor” en tus obras que te identifique al instante? ¿O le das mayor importancia al mensaje más que al estilo?

P. A.: Creo que esta preocupación afecta más al espectador y a su riesgo de sentirse inseguro a falta de un guión al que acogerse. Mi lema es que lo opuesto a la inseguridad no es la seguridad, es la libertad, libertad incluso para sentirse inseguro. Puede que mi “firma de autor” sea la diversidad.

Pascual Arnal

http://www.pascualarnal.com/