La sinuosa senda del 'Blue alert'

Anjani Thomas y Leonard Cohen, por Lorca Cohen

Llego a casa, tras un día que bien podría haber tenido 72 horas. El estrés me invade y el calor aprieta con fuerza. Insoportable. Una ducha fría calma la ansiedad. Luego, me dejo llevar por una voz aterciopelada venida desde Hawaii. La misma voz exótica que un día conmocionó al poeta de la música, Leonard Cohen. Y no es de extrañar. La delicadez con que sugiere las letras de sus canciones resulta exquisita. Da la sensación de estar contándonos un secreto, como si fuéramos niños que dejan volar su imaginación. Cándida, sensual, con ciertos toques irresistibles de inocencia, y realmente bella. Así es Anjani Thomas, la musa que hoy me rescató de la cruda realidad teñida de farsas. La cantante y compositora me invita a viajar, a despejar mis dudas, a soñar con noches íntimas, de juegos cómplices. Aún no sé cómo llegó hasta mí esta dulce y melodiosa voz. Suerte que tuve. No lo dudo. A través de esa alerta azul --Blue alert-- nos conduce a su mundo, a su música. Ahí comienzas a sentir de nuevo la esencia del jazz. Ahora dormiré tranquilo. 

P. D.: Quisiera compartir con vosotros la magistral Blue Alert --cuya letra, por cierto, es del mismísimo Cohen, su "protector" musical--, que da título a su último trabajo publicado en 2006 por el sello Columbia.