El polémico rechazo

'No', obra de Santiago Sierra

Leo una entrevista que le hicieron a Santiago Sierra, el artista que ha rechazado el Premio Nacional de Artes Plásticas y sus consiguientes 30.000 euros. En ella, el ahora foco de todas las miradas del mundo del arte en España --y, por supuesto, de la mirada de la ministra González-Sinde, esa mujer que creo que no cae bien a nadie o casi nadie desde que alcanzara ese puesto tan devaluado hoy-- dice algo que me parece oportuno reflexionar: "La democracia es una estafa, es la dictadura perfecta. Se elige entre dos dictadores: uno que sonríe y otro que gruñe. Ambos tienen los mismos jefes". Es cierto que Sierra siempre se ha caracterizado por su carácter polémico, su arte casi siempre le ha servido como un arma arrojadiza para criticar con dureza aquello que no le es afín, es decir, la política y todo lo que ella conlleva. Rechazar tan solo 24 horas después de haberle sido concedido este galardón, que se supone es uno de los más respetables e importantes de nuestro país, ha sido un jarro de agua fría para esa cúpula política que dice ser intelectual. En pocas palabras, Sierra les ha dado un puñetazo en los morros. Sabiendo que para el artista madrileño la democracia es una estafa, no es de extrañar que actúe de esa forma. Sin embargo, yo casi siempre me pregunto si esa actitud no es sino una forma de promocionar su imagen y, por ende, vender más. El mismo Santiago Sierra reconoce que todo es business, por tanto, tengo dudas sobre si su maravillosa actuación de "anti-sistema" es o no cierta. Aún con todo, lo que sí debo agradecerle son sus palabras sobre la barbarie bancaria que asola España desde hace ya largo tiempo. Estoy totalmente de acuerdo con Sierra cuando dice: "Creo que somos muchos los que estamos hartos ya de estar hartos de una casta política que se turna en el poder con el único objetivo de explotar a la población y ponerla al servicio de intereses privados". No obstante, sigo sopesando la idea de si el polémico rechazo de Sierra no es más que una estrategia publicitaria. Cada cual que piense lo que crea. Yo, como siempre, tengo mil dudas sobre todo lo que me rodea. No me creo nada de nada. 

Comentarios

Esther ha dicho que…
Puede que sienta que no aceptar el premio es ser consecuente con sus ideas y su arte. Si es anti-sistema es natural que no quiera aceptar. Piensa que son 30.000 euros, según dices. Todavía quedan personas integras con valores morales profundos. Y Santiago Sierra es una de ellas. ¿Qué nos pasa al pueblo? Por qué no nos revelamos? Por qué la juventud no solo no se revela si no que sigue al máximo las leyes de un consumismo brutal y un capitalismo peor? Qué otro sistema de gobierno queda? No hay otro. Quizá países como Noruega y Suecia son los más civilizados. Por otro lado, los comunismo son atroces en su empeño de imponer una dictadura y eliminar la libertad individual, la expresión personal? En fin, no veo alternativa porque no la hay, el 'ser humano' es así de bruto, no?

Se puede seguir hablando durante horas.

Muchos besos.
Esther ha dicho que…
Eric, disculpa que 'pegue' las palabras de Santiago dichas en su blog, me han encantado y no creo que sea un montaje ¿por qué, qué sentido tiene? En un mundo de gente alelada está muy bien que haya un Santiago Sierra que nos despierte del letargo. Piensa que hay mucha envidia en este país.

Ahí va:

"Agradezco mucho a los profesionales del arte que me recordasen y evaluasen en el modo en que lo han hecho. No obstante, y según mi opinión, los premios se conceden a quien ha realizado un servicio, como por ejemplo, a un empleado del mes. Es mi deseo manifestar en este momento que el arte me ha otorgado una libertad a la que no estoy dispuesto a renunciar. Consecuentemente, mi sentido común me obliga a rechazar este premio. Este premio instrumentaliza en beneficio del Estado el prestigio del premiado. Un Estado que pide a gritos legitimación ante un desacato sobre el mandato de trabajar por el bien común sin importar qué partido ocupe el puesto. Un Estado que participa en guerras dementes alineado con un imperio criminal. Un Estado que dona alegremente el dinero común a la banca. Un Estado empeñado en el desmontaje del estado de bienestar en beneficio de una minoría internacional y local. El Estado no somos todos. El Estado son ustedes y sus amigos. Por lo tanto, no me cuenten entre ellos, pues yo soy un artista serio. No señores, No, Global Tour. ¡Salud y libertad!"
Eric GC ha dicho que…
Puede ser, Esther. Yo comparto muchas de las opiniones de Sierra con respecto al porqué rechazar el premio. Pero siempre me viene a la memoria aquello que: "da igual que hablen bien o mal de uno, mientras se hable". No soy portador de la verdad absoluta, ni pretendo serlo. Solo digo que me confunde un poco su forma de actuar. Nada más. Criticar al estado me parece de los más oportuno y necesario, ya que sin crítica no habrían cambios. Sin embargo, hay muchos que aprovechan esas críticas para enriquecerse, sea a nivel intelectual o monetario (por la publicidad). No sé si me he explicado bien pero es lo que pienso.

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